SOLA

Hace calor, mi cuerpo lo siente, mi cabeza lo siente y sin embargo mi corazón tiene frío. Es el frío de la soledad que me acompaña, esa que me empeño en acoger como a una amiga y no como a una amenaza. Esa que me lleva a pensar, sentir y aprender.

Sola, me siento sola y triste unas veces, alegre otras e insatisfecha siempre. Siempre en el camino, sin dejar de avanzar. Un paso tras otro, sin parar, sin descanso. Agotada a ratos, rendida otros y siempre sola.

Y es que no cumplo ningún requisito para ser una persona normal. Aunque la gran pregunta es qué es ser normal... Si soy sincera, tampoco tengo interés alguno por cumplirlo.

Normal para mi es abrazar con fuerza, besar dulcemente, apretar una mano y regalar una sonrisa al mismo tiempo. Normal es decir te quiero cuando lo siento, no hacer nada que no quiera, bailar porque sí, beberme una cerveza bien fría en cualquier parte. Normal es vivir la vida de la manera más intensa posible, cada día como si fuera único. Siento, aunque a veces demasiado, pero lo hago con mayúsculas. Normal es llorar escuchando una canción y perderme en los recuerdos. Normal es no dejar de pensar ni un solo minuto, es pararse y ver y no solo mirar. Normal es no dejar de sonreír hasta en los peores momentos...

Mi camino, mi normalidad, me lleva a la soledad muchas veces. Así tendrá que ser, así tendré que estar y sentirme ... Sola.

Y PARA QUÉ PENSAR ...?

"Piensas constantemente", me dijo mientras acariciaba mi pecho con sus labios ...

Sus manos en todo mi cuerpo y yo pensaba. Su boca en todos mis huecos y yo pensaba. Su cuerpo sobre el mío y yo pensaba ...

Aquella mañana me desperté pensando lo poco que me apetecía ese encuentro y lo mucho que lo deseaba por otra parte. La sensación que tenía de que iba a ser más de lo mismo y las ganas que me invadían de que fuera algo diferente. Acudí a la cita sin haber pensado mucho que ponerme; hay cosas que no deben pensarse sino sentir. Y esa mañana sentía que aquella falda colorida y esa camiseta ajustada que tan bien sienta a mis redondeces era lo adecuado.

"Que ganas tengo de tocarte las tetas" Y ese gesto de morderse el labio que tanto dice y esa cara de deseo incontenible y yo pensaba...

"Vámonos a casa". Comenzamos a caminar cogidos de la mano, cantando canciones de entonces, rozándonos sin querer unas veces, queriendo otras. Mientras, yo pensaba...

"Descansa pequeña", me dijo al cerrar la puerta mientras me dirigía al ascensor. Arreglo mi pelo, suspiro, salgo a la calle, voy hacia mi coche, me enciendo un cigarro y pienso que para que pensar ...