Obama, como ya escribí en su momento, no significaba un cambio político importante sino social y de madurez del pueblo norteamericano por una parte y del mundo en general por otra. Sabíamos que él no podría en un país como Estados Unidos hacer milagros, sabíamos que allí no existe una izquierda como la entendemos nosotros. Pero significaba mucho que un hombre negro fuera presidente por primera vez.
Aquella noche, la primera en la que puse el despertador y de la que ya escribí algo en su momento, me emocioné, lloraba mirando la televisión y recordando la lucha y el sacrificio de muchas personas no sólo negras, pero si especialmente de ellas. Eran de esas lágrimas que salen solas, que no puedes controlar, que tienen vida propia. Pensaba que si de verdad existía otro mundo donde vamos al morir, Luther King, Rosa Parks, Malcom y tantos otros debían de estar en ese momento tomándose un whisky y riendo sin parar.
Aquella noche al lado de mi pareja entonces, negro cómo muchos sabéis, mi corazón se llenó de esperanza. Pensaba en mi hijo y el orgullo que para él tenía que significar eso. Con cuatro años yo le enseñé una foto de aquel hombre negro que iba hacer historia.
Me importaba poco la política en ese momento. Eran más importantes la tolerancia, el conocimiento, el avance. Que nuestros hijos se familiarizaran con pieles de otros colores y el presidente de los Estados Unidos está presente en todas partes.
Esta noche me ha seguido importando poco la política. Y he llorado de pena. Me da igual que este tipo sea un showman, que parte de lo dicho por él durante estos meses haya sido eso, espectáculo. Porqué le han votado por ello. Y eso me asusta.
No me voy a quedar a escuchar a los expertos, en este momento el que las bolsas hayan caído brutalmente no me conmueve. Si lo hace recordar aquel primer discurso de Barack Obama. Sí, ya sé que son palabras, como las de Trump hace un momento, un montón de agradecimientos a su familia y poco más.
"... porque creían que esta vez tenía que ser distinta, y que sus voces podrían suponer esa diferencia.
Es la respuesta pronunciada por los jóvenes y los ancianos, ricos y pobres, demócratas y republicanos, negros, blancos, hispanos, indígenas, homosexuales, heterosexuales, discapacitados o no discapacitados. Estadounidenses que transmitieron al mundo el mensaje de que nunca hemos sido simplemente una colección de individuos ni una colección de estados rojos y estados azules."
BARACK OBAMA (Discurso de la victoria, 04-2008)
Al final va a resultar que soy una romántica.
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