POR DEBAJO DE LA MESA

A ver que hago yo hoy con esta frase que martillea mi cabeza desde esta mañana “por debajo de la mesa….” Ala, venga!! Y es que me he levantado un poco moñas las cosas como son, será ese calorcito que parece que va llegando, el sol, la necesidad de vacaciones y mis cambios hormonales…

Por debajo de la mesa siempre les gusta a los niños pasar de un lado a otro, sobre todo en esas comidas familiares cuando pueden encontrarse con montones de pies de formas, tamaños y colores tan diferentes. Lo que más les gusta es chocarse entre ellos, con la pata de la mesa o cuando se cae el bastón del abuelo.

Por debajo de la mesa hay un mundo de gestos, de necesidades, de mensajes perdidos que nunca llegaran a sus destinos. Esas sandalias con ese sugerente tacón donde descansan esos pies cuidados con esas uñas pintadas de ese atrevido color rojo… Esoszapatos tan serios y elegantes, limpios, más que limpios brillantes, con ganas de deslumbrar que se cruzan nerviosos cuando roza inocente ese tacón provocador…

Por debajo de la mesa viajan tantos deseos… Esas rodillas que se rozan, se ruborizan y finalmente permanecen juntas, sin querer moverse, esperando el gesto de la otra que no llega, pero no importa, ahí está, tann cercaa…

Por debajo de la mesa pasa el miedo, la ilusión, la inseguridad, el rencor, el rubor, la alegría, la ansiedad, el dolor, la paciencia, la esperanza, el amor. Por debajo de la mesa queridos pasan un montón de sentimientos y sensaciones. Agachémonos, a ver quien es capaz de aguantar la risa y caza más. Muac